Antes, cuando era niño, no podía imaginar las consecuencias luminosas que me traería la guerra. Mi país se sumergió en la penumbra, mis papás desaparecieron y yo tuve que salir adelante solo. Las cosas de pronto tuvieron un sabor amargo. Hasta que conocí a Acevedo y su ceguera me hizo ver. Esta es la historia de nuestra amistad y de cómo me convertí en lazarillo.
Novela muy bien escrita e interesante que atrapa rápidamente al lector. La voz del protagonista infantil resulta muy verosímil, permitiendo conectarse con sus emociones. Sus personajes y acontecimientos se van transformando a lo largo del relato, aspecto que aporta a una lectura ágil y amena.
Chile
160
15 x 24 cm
Rústica